La Almazara de Rancho Olivares tiene una rica historia que se remonta a mediados del siglo XX. Originalmente un pequeño olivar en el Valle de Guadalupe, creció hasta convertirse en el olivar más grande de México y el mayor productor de aceite de oliva de América Latina. Esta tierra jugó un papel importante en la configuración de la región y fue precursora del famoso valle del vino. En el 2018 transformamos esta propiedad histórica en un impresionante lugar para celebrar bodas. Con nuestra experiencia y atención al detalle, creamos el ambiente perfecto para su día especial.

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Hoy Rancho Olivares vuelve a producir pequeños lotes de aceite de oliva para restaurar la esencia de la propiedad. Como rancho en funcionamiento, cuenta con una producción de alta calidad de ganado vacuno y ovino para carne, así como caballos criados en la propiedad. Nuestro rancho es verdaderamente un lugar donde se mezclan tradiciones y nuevas ideas. Contáctanos para descubrir cómo podemos hacer realidad la boda de tus sueños.

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